Como animal errante que no tiene inconveniente en abandonar su lugar de nacimiento, porque se ha agotado el pasto, para ir a plantar las posaderas en el primer sitio que encuentre que me satisfaga, que mira cada vez más a Estados Unidos como futuro solvente de las competiciones del motor, me he alegrado particularmente de una nota que he visto reproducida en algunos sitios, y es que el madrileño Andy Soucek, que fue probador de Virgin la pasada temporada de F1 (o sea, portero de discoteca), ha decidido tirar la toalla repelente, podrida y siempre atrayente de la "categoría reina". A mí que me lo expliquen, pero ¿se puede saber para qué coño sirve un piloto probador en la F1 actual, donde están prohibidas las pruebas toda la temporada?
El piloto español ha dejado muy claro que quiere competir y que está buscando un futuro en la IndyCar. Y yo que me alegro, y más todavía al saber que ya está buscando casa en Miami, y ya estoy casi en éxtasis cuando
he sabido que el equipo que puede ser en el que se acomode Soucek sea Andretti Autosport, un equipo de casi primera fila en el serial de monoplazas americano.
Y yo pienso... qué bueno sería para el por definición, inculto seguidor español (perdón por la generalización, pero el que se de por aludido, que se arrepienta de sus pecados), tener un horizonte de carreras diferente al monotemático "fernandoalonsismo" imperante, donde un piloto podría tener la posibilidad de luchar por estar muy arriba en las clasificaciones, y que además, estaría respaldado por otro piloto español, Oriol Serviá, que presumiblemente tiene plaza segura en otro equipo resultón de la categoría, Newman Haas. ¿Pero no es esta demasiada información para mucha gente que acaba de descubrir que existen las carreras de coches? ¿No se aturullarán cuando vean que existen circuitos como el de St. Petersburg, Long Beach, Toronto, alguno de ellos con mayor historia en la F1 que circuitos asentados en la "categoría reina"?
Yo creo que sí, pero también creo que muchos aficionados a la F1, son gente que tiene interés en ver un poco más allá, y que realmente podrán disfrutar e iniciarse en un mundo de carreras que no tienen Ferraris, Williams, Maranellos, Schumachers... Aunque yo tengo un gran miedo para que esa adaptación a otra categoría se produzca de forma efectiva, y es que en América se corre en circuitos ovales también, acaparando éstos casi el 50 por cien de las pruebas del calendario; y el aficionado europeo no tiene, no ha bebido la tradición de las carreras en óvalos desde las fórmulas de promoción. Y reconozco que es difícil, pues es un tipo de competición (la de las carreras en ovales) a la que no es fácil cogerle el tranquillo... pero una vez que le agarras el gusto, te quedará en el paladar de por vida.
Pero yo creo que el verdadero problema que tiene el aficionado español no es que no entienda de otras competiciones, sino que es elitista, y le han vendido la F1 como la élite del deporte motor mundial, y no le interesa lo más mínimo orientarse y mostrar interés en categorías que él piensa que es un paso atrás. Y lo peor es que esrtá convencido.