“Dios aprieta pero no ahoga”, eso es lo que me enseñaron cuando era un inocente infante, de esos que rocían su niñez con la variedad, y que pasados un puñado de años apenas recuerdan determinadas fragancias. Esa frase parece muy cierta, pero si se detienen a pensar un poco la cuestión, se darán cuenta que son siempre unas palabras que decimos los vivos, y hay muchos que han quedado por el camino, víctimas de la ira de Dios, o simplemente de un dicho. Al que quedó deshechado, Dios lo ahogó.
Últimamente salpican nuestros raciocinios de aficionado noticias sobre las revueltas en los países árabes, y muchos nos escandalizamos y alarmamos, pero habría que buscar en la mente de cada uno y discernir si ese pesar es digno o no lo es, es decir ¿nos importa un carajo el progreso de estos pueblos, el salto a un régimen político mejor, o simplemente vemos las revueltas como un hecho que pone en peligro nuestro hobby? Como dice mi amigo Ian Montgomery, de Radio Ranilla “cuidao con eso”.
La F1 lleva varios años siendo apretada, estrangulada por el Dios de turno, que no voy a entrar en si es Ecclestone, Todt o San Padillo Genuflexo. No me importa. Lo que me interesa vivamente es que se están
cargando el deporte (porque me niego a llamarlo de otra forma, aunque lo parezca), y las críticas a la política de esparcimiento de Bernie Ecclestone han sido y son abundantes, y desde la pluma de este redactorcillo también. Y la Formula 1 no ha muerto, y sigue con aparente buena salud, pero tengo la sensación de que la F1, ese ser salvaje, que siente su cuello retorcer, se apresta a recibir otro golpe más, otro retorcimiento en su pescuezo, quizá fatal.
¿Y de dónde vendrá esta vez? Pues a la que parece ser una necesaria reestructuración de las sedes “descastadas” y políticamente inestables, su suman ahora varias citas de rancio abolengo en el calendario, Melbourne, que ya vienen avisando desde hace tiempo, Valencia, esta no es histórica, pero ha sido puesta en duda por el Cyborg Ecclestone ,y Barcelona. No es sorpresa para mí ver que las citas españolas corran peligro de desaparición del calendario, dada la nefasta situación económica en España, que ya no se puede permitir ni ofrecer opio al pueblo. Esta vez ha sido el Presidente del Gobierno de Cataluña, Arturo Mas, el que ha expresado que la situación económica es muy delicada y que hay que realizar ajustes para que la economía salga delante de forma satisfactoria, y en definitiva, la F1 es algo prescindible.
Similar es el caso de Melbourne, y aunque la situación económica en Australia es bastante más brillante que la de España, los de las antípodas se han cansado de tirar el dinero en el bolsillo de Ecclestone. En el Parlamento han explicado que han preguntado a los residentes de la que era hace unos años la ciudad más verde del mundo, y el resultado ha sido concluyente, pues de cada diez consultados, nueve han manifestado su deseo de que el gran premio no se celebre en sus calles, pues las pérdidas se acumulan año tras año.
El asunto es preocupante, pues unos países no ofrecen la garantía de estabilidad política y social necesaria para celebrar un evento deportivo de masas, y otros, no ofrecemos la solvencia económica suficiente para que un despilfarro en este deporte elitista sea visto con buenos ojos por las arcas de los estados y por los políticos que actúan de una forma responsable.
Y por más que lo miro, me quedo sin calendario, o mejor dicho, con un calendario a la antigua, con casi la mitad de carreras que hay hoy, y lo que es peor, con una sensación de desaliento, de que todo está perdido y que seguimos irremediablemente condenados a la frustración de sabernos manejados como títeres en el guiñol de la disconformidad.
Estimado Sr. Herzog,
ResponderEliminar¡Qué bonito es que la Naturaleza jugase al azar con los genes! Sobre una cuestión nada caliente, estamos totalmente en desacuerdo.
Par empezar por la definición de F1. Sigo opinando que cualquier parecido con el deporte es pura casualidad.
Su tristeza por que no haya GP en España es motivo de alegría para mí. No es de recibo que llevemos varios años que la Generalitat Valenciana no pague las nominas de los últimos meses del año de sus cuatro universidades y sí tenga dinero para pagar al ladrón de Mr E ¿Le parece bien que la Generalitat Catalana exigiese poderse endeudar más que nadie para pagar entre otras cosas estos caprichos? Lo importante debe ser lo primero un GP es una tontá, por mucho que me cuenten que hay un impacto económico, etc. Más impacto es un buen museo, y es para todos los días, y más barato que lo que exige Mr. E. Si se cierra España, Australia, Bélgica (aquí es el país) y los nuevos países desaparecen que quedará nada.
Y como esto no es un deporte, sino un negocio, según la ley de la oferta y la demanda Mr. E tendrá que bajarse del burro económico para que vuelvan ciertos países, e incluso puede que las condiciones sean impuestas por el otro lado. No como ahora.
Espero con ansia el cierre del mayor número posible de sedes por parte de los organizadores.
Saludos
Ya lo dije y aunque fuera en broma al final va a ser cierto: si no palma antes a Bernie lo que lo queda es explorar sus posibilidades en África.
ResponderEliminarYo también creo que es necesario un cambio en la Fórmula Uno. Ecclestone debe reducir beneficios para que "nuevos" países alberguen esta competición: Suecia, Francia, Austria,...Veo bastante lejana la posibilidad de que el gran circo se desplace a Argentina o Sudáfrica, pero quién sabe...
ResponderEliminarQuerido Primo, en lo único que no coincidimos es en la catalogación de la F1 como un deporte o como un negocio. Ya sabes que soy un romántico, pero no iluso, y sé perfectamente la trama de intereses de la "categoría reina". Pero por más que apeste la F1, siempre seguiré con la percepción de que el fondo de todo es un deporte de caballeros, aunque esté contaminado en su totalidad. Eso quiero y a eso me agarro.
ResponderEliminarSobre el resto... iba a decir como me dijo el maestro Orroe un día "no me lees con la suficiente atención", pero cambiaré y te diré que no me he debido explicar bien, pues el daño colateral de un desmoronamiento masivo de sedes en la F1 sería la caída de la FOM y toda su organización... que se produzca ya, y hablaremos entonces de deporte, aunque sea en un porcentaje pequeño.
saludos
Yo hice hace poco de bruja en un post de mi Primo, y pronostiqué que Ecclestone no vería al siguiente campeón de F1... ¡cugüenlaputa, que la solución sea que casque un tío! Manda huevos.
ResponderEliminarSi la reducción de márgenes es efectiva, no debería ser un problema la organización de carreras en países menos favorecidos.
ResponderEliminarsaludos
bueno también no es fácil mantener un concepto tan caro, y digo caro no solo por la usura y por el elitismo que la aquejan, sino sobretodo porque se trata de la categoría de automotor por excelencia, que tiene que traer lo más novedoso en tecnologia y todavia tener impacto mundial para ser una inversión atrayente
ResponderEliminares un negocio de alto riesgo, no lo dudo. nada raro verla desaparecer y reaparecer de nuevo en algunos años.
Que Berniees un pajarraco muy hábil no es algo que se le escape a nadie, de hecho, estos días ha hecho la jugada maestra al endiñarle toda la responsabilidad a jeque de Bahrein, para que haya un responsable a quien pedirle cuentas por la no celebración de la carrera. Es ladino y escurridizo como las serpientes, pero no creo que sea necesaria una persona así para mantener el tinglado... quizá para crearlo sí, pero mantenerlo...
ResponderEliminarsaludos
Estimado Sr: Herzog,
ResponderEliminarPerdone mi distracción a la hora de leerle (y mi tardanza en contestar pero el sistema de enviarme emilos de su blog me tiene manía y no me avisa nada), pero es que con estos alumnos boloñeses que tengo soy incapaz de hacer/leer una frase que tenga algo más de un verbo (o en su defecto un sustantivo). Pero resumiendo (y tergiversando) reconoce que es un negocio que si quisieran podría ser un deporte ¿No?
Saludos
Querido Primo: Evidentemente la F1 es un negocio, como el resto de los deportes, con afán de lucro por todas partes, como el ciclismo, donde drogan a las personas para obtener más dinero, o como el boxeo, donde las mafias amenazan y asesinan a los individuos molestos... pero no por ello deja de ser un deporte.
ResponderEliminar¿Nos ponemos olímpicos entonces y solo admitimos como deporte a los olímpicos? Pues quitamos nuestro querido rugby como primer ejemplo ;)
saludos
Estimado Sr. Herzog,
ResponderEliminarNo, y un rotundo no. Que haya gente paseando por la calle y sea atropellada por un bistec con clembuterol envuelto en poliestireno, no quiere decir que los gentlemen del rugby no sean deportistas. Por favor, hasta ahí podíamos llegar ¿Se imagina a John Kirwan o Serge Blanco en esa situación? No.
PD. El boxeo ni lo considero deporte, ni tan siquiera espectáculo. No es entendible por mi.
Sabía que nos pondríamos de acuerdo en lo tocante a ese noble deporte de caballeros... pero ¿y por qué el boxeo no es un deporte? El boxeador es gente que no quiere valer para otra cosa que para sacudirle mamporros a sus semejantes... ¡que lo haga en el ring! Y si le ocurre algo malo, es mayorcito para saber donde se metía. Es como el corredor de coches que tiene un accidente o el ciclista que se cae.
ResponderEliminarsaludos
Estimado Sr. Herzog,
ResponderEliminarEntiendo su justificación del boxeo, por cierto la misma que usa mi padre, pero me repugna la violencia física y más cuando no ha habido ninguna escusa para ella. Lo sé es algo irracional (¡En un racionalista!) pero no puedo con el boxeo.
Saludos
¿Deporte, negocio, espectáculo?: de todo un poco, como el Circo Romano y posiblemente todo ello necesario porque si no fuera por el aspecto financiero, no sería posible un deporte tan endiablademente caro.
ResponderEliminarBahrein se cierra (¿por ahora?), pero aún quedan los emiratos (Abu Dabi y Qatar) que aunque parezcan más tranquilos, no dejan de ser monarquías suníes.
El modelo Ecclestone valió, pero ahora debe surgir uno nuevo, acorde a una realidad económica y social diferente; mucha gente pensamos que Ecclestone no está para liderar esa nueva F1 y que debe ceder el mando, pero, ¿a quien?. A lo mejor al final nos quedamos con lo malo conocido.
A mí también me repugna, y se me cae el alma a los pies cuando veo a un boxeador destrozado por los golpes del contrario, pero no deja de ser una actividad para la que es necesaria una preparación física muy completa y concreta, por lo que si se requiere un buen estado de salud, debería considerarse deporte ¿no?
ResponderEliminar¡O no! porque si se requiere ese estado de salud para empeorar después tu salud a base de golpes... pero de todo deporte exigente, se termina siempre peor de lo que se empezó ;)
saludos
Cierto es lo que dices. Yo ya escribí hace no mucho un post sobre esta bicefalea de la F1, que creo no es lo más adecuado, y recuerdo que a la mejor conclusión que llegaba era que quizá una FIA al mando de todos los aspectos de la F1 sería lo menos malo, ya que creo que no estamos preparados para afrontar una F1 llevada adelante por una empresa, al estilo USA.
ResponderEliminarsaludos
Buenas tardes Martín.
ResponderEliminarLa Formula 1 es un deporte para los aficionados y un negocio para los que están dentro de ella, como cualquier deporte profesional, por lo que yo creo que para que se produzca un cambio importante debe ocurrir algo drastico como que nadie pueda o quiera acojer un Grán Premio; con lo que se produciria un cambio de poder.
En cuanto a lo que puede ser un buen modelo de gestión yo apuesto por el modelo Premier Leage, con la fia organizando los grandes premios y con los equipos negociando conjuntamente los derechos de televisión; con lo que desaparecería el intermediario (FOM) y habría un reparto mas justo del dinero enter los equipos y quizas un aumento de la competitividad del deporte.
Un Saludo.
A la paz de Dios, Fourier ;)
ResponderEliminarSin duda es buen modelo el que propones, pero se me ocurre un pero ¿y si hay un Manchester United que genera de por sí una atracción televisiva y mediática mucho mayor? ¿no querrá más parte del pastel, aumentando las diferencias entre chicos y grandes constantemente? Se me ocurre que una especie de draft a lo NBA, repartiendo más para los pequeños y menos para los grandes, podría hacer menores las diferencias.
Y digo yo ¿no se puede hacer la FIA también con el tema de los derechos?
saludos
Buenas noches Martín.
ResponderEliminarEl reparto de los derechos se divide en tres partes: la mitad se reparte por igual entre los clubes, una cuarta parte se destina en función de la clasificación de los equipos al final de la competición y la cuarta parte restante se paga en función de la audiencia de los partidos; y el dinero que pagan las televisiones extranjeras se reparte por igual entre los 20 equipos. Aún habiendo diferencia entre los de arriba y los de abajo (en la Premier entorno a los 24 millones), por lo menos da mas posibilidades a los de abajo para competir bien (la diferencia en la liga española es de 128 millones entre el primero y el ultimo).
Un saludo.
Pues pinta bastante bien, porque tampoco sería del todo justo que el equipazo que más dinero genera para el deporte, tenga los menores ingresos.
ResponderEliminar¿Y si cada equipo gestionase sus propios derechos de imagen?
En este caso los derechos de imagen son de cada uno, pero la tarta grande es la que reparten de esta forma. En cuanto a que lo lleve la FIA mejor que no porque Mr. E sería presidente en breve y si no saldria algun sucesor suyo, con que gobiernen como hasta ahora y gestionen la organización de los grandes premios sería suficiente.
ResponderEliminarUn saludo.
Yo es que soy bastante contrario a esa bicefalea que en determinados sitios se da. Creo que solo debe existir un jefe que lo controle todo, sin pedir permiso a nadie, pero asesorándose constantemente con elementos situados un escalón debajo de él. Y creo que dos organismos que controlen a la F1, como son FIA y FOM, son perjudiciales para la correcta operatividad del deporte en general.
ResponderEliminarsaludos ;)
Buenas tardes Martín.
ResponderEliminarA mi las bicefaleas tampoco me gustan pero de momento nos tendremos que aguantar.
Un Saludo.
Buena reflexión Martín.
ResponderEliminarSer un "deporte" elitista no es algo que beneficie a la F1 ahora mismo, y creo que eso es más peligroso que la ausencia puntual de alguna cita por "revolución no prevista" (muy fuerte lo que está pasando, en el siglo XXI).
Siento no poder pasarme más a menudo, pero cuando lo hago, es un verdadero placer.
Un abrazo
El elitismo siempre estuvo bien, aportando variedad, pero por su propia definición, no es aplicable a deportes mayoritarios, es decir, que unos pocos se queden con un pastel que tiene demasiado azúcar, pues lo pobres suelen ser propensos a padecer trastornos gastrointestinales por la consumición del edulcorante.
ResponderEliminarLos deportes, para los aficionados, no para los que les importa un carajo.
Un placer es tenerte de vez en cuando por aquí ;)
saludos
Pues pinta bastante bien, porque tampoco sería del todo justo que el equipazo que más dinero genera para el deporte, tenga los menores ingresos.
ResponderEliminar¿Y si cada equipo gestionase sus propios derechos de imagen?