6 de octubre de 2010

Se ofrece Director Técnico de F1

¿Se acuerdan de la película “Con faldas y a lo loco”? Si, esa en la que una espectacular y seductora Marilyn Monroe tocaba el ukelele y compartía guiños y ginebra con Jack Lemmon y Tony Curtis. En ese film aparecía un mafioso que apodaban “botines”, un tipo pequeño, con cara de malo, resolutivo, astuto, maquiavélico (como buen hampón) y con una gran desbandada de gente a su alrededor ¿No les recuerda a nadie de la actual F1?

Ayer se confirmaba por parte de Renault que el hasta entonces Director Técnico de la marca del rombo/diamante, el nor-irlandés Bob Bell, dejaba de pertenecer a la plantilla del equipo francés… o pseudo.

En Renault ya han avisado de que la temporada 2010 está prácticamente acabada para ellos y que esperan arrastrarse por la pista, deseando no perder demasiado terreno con equipos que todavía montarán importantes mejoras en sus monoplazas, como Williams. Y como perro viejo que soy, desconfío de la casualidad de las acciones y sucesos en la F1, encarrilando todos los tejemanejes a una causalidad premeditada por las partes en liza ¿Por qué ha presentado su dimisión el señor Bob Bell justo antes de la presumible debacle de Renault en 2010?


El señor López, dueño (o como lo quieran llamar) del equipo Renault F1, ha dejado entrever que lo sucedido es bueno para el equipo, porque les permitirá renovarse y actuar con mayor ambición e innovación de cara a los meses venideros, pero creo que poner en su puesto al que es el director del equipo, Eric Boullier (ahora pluriempleado), deja claro que nada presumía del asunto y que le ha cogido con el pie cambiado.

Mirando a la cera de enfrente, podemos encontrar muchas cosas, traiciones, verdades, virtudes, pero si fijamos nuestra atención en Ferrari, todos estaremos de acuerdo en que el plantel técnico de la Scuderia no es el que soñaba Signore Enzo, y que si no es por la llegada de Pat Fry procedente de McLaren, podrían estar a día de hoy centrados en la siguiente temporada. Donde tienen que renovarse es en Ferrari y no en Renault, pues escarbando un poco en el plantel técnico, comprobaremos que el puesto de director técnico lo ostenta un tal Aldo Costa, un tipo falto de imaginación que lleva muchos años ya en Maranello, que se ha dedicado a copiar gadgets de uno y otro para hacer un bólido competitivo, sin aportar nada nuevo. Ya lo decía Newey “Hay coches que parecen hechos por un comité. Parecen el resultado de una lista de piezas entregada a un pobre tipo que ha tenido la poco envidiable tarea de meterlas en un solo vehículo. Pero no dan la impresión de complementarse.hay coches que parecen montados”.

Cierto, Costa no es el encargado de diseñar todas y cada una de las partes del coche, pero es el que tiene a su cargo al grupo de ingenieros que no saben muy bien qué hacer, debido quizás a una errática y titubeante dirección por parte de Costa.

¿Recuerdan el primer párrafo? Pues el señor Botín, seguro que no quiere tener el año que viene la incertidumbre y tensión que está teniendo en la presente temporada. ¿Y qué mejor contratación que la de un director técnico que ha dado grandes triunfos a Fernando Alonso, un hombre brillante y de completa confianza?

Además surge la duda que apuntaba antes ¿por qué ahora y no al final de temporada, que sería lo más lógico? Probablemente en Maranello están preparando ya su coche para el año que viene, o al menos estarán a punto de hacerlo, y para eso no pueden esperar al final de la temporada. La ecuación perfecta, un equipo con gran necesidad de cerebros, un hombre que tiene un gran palmarés y una mejor profesionalidad, veterano, y conocedor desde sus inicios del filón de Ferrari actual, Fernando Alonso… ¡y además está en paro!

© Imágenes │ RenaultF1