Munich.- El gigante alemán de la automoción está muy disgustado con la imagen que el equipo McLaren y sus componentes están mostrando. Mercedes está viendo salpicado mes a mes su prestigio y, la última vez que ocurrió, en el GP de Australia pasado, ha hecho que los jefes de la marca de la estrella planeen una reunión mañana miércoles, al objeto de determinar una reducción de costes y sus posibles efectos sobre su continuidad en la F1. Ellos tampoco escapan a la crisis internacional.
El hecho es que el rendimiento deportivo está siendo mediocre y reina la sensación de que Withmarsh y sus sucuaces manchan el nombre de Mercedes con el goteo constante de escándalos protagonizados por el equipo McLaren. Norbert Haug, Vicepresidente Deportivo de Mercedes-Benz, comentó tras la carrera de Malasia que no puede afirmar que Mercedes esté los próximos años en la parrilla, ya que no sabe cual será la evolución de la situación económica mundial.
Sobre el incidente de Australia dijo que le gustaría estar viendo victorias y no asuntos feos como ese.
Espionaje a Ferrari, Montoya dice que no soporta a la cúpula del equipo, Alonso se tiene que ir de McLaren por beneficiar éstos a su compañero, Hamilton denuncia a su propio equipo, comunican por radio a su piloto para que provoque la eliminación de otro piloto... Es normal que los señores de Mercedes se planteen su futuro, pero no deberían plantearse eso, sino únicamente el nombre de sus socios deportivos.
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